Plantas de totora en el lago de hasta 4 metros de alto |
¿Qué hay detrás del colapso del siglo XVII en Rapa
Nui? ¿Fue consecuencia de la continua sobreexplotación de los recursos por
parte de los pobladores de la isla? ¿O de una serie de cambios climáticos que
se venían dando desde finales del Holoceno? Recientemente, el proyecto Rano Kao
Expedition, dirigido por la Dra. Candace Lynn Gossen de la Universidad de
Portland aporta interesantes resultados que ayudan a aclarar uno de los
paradigmas más sorprendentes de la Isla de Pascua: por qué se produjo en la
isla uno de los ejemplos más extremos de crisis social y medioambiental de la
Historia.
Texto: Alex Guerra Fotos: Candace L. Gossen
Texto: Alex Guerra Fotos: Candace L. Gossen
El lago del volcán Rano Kau |
Antecedentes
El objetivo principal del proyecto de la Dra. Gossen se centró en reconstruir la ecología
del lago para desvelar los cambios climáticos de los últimos milenios en la
isla, y encontrar una conexión entre los patrones de las precipitaciones, los
cambios en los niveles de agua del lago y la gran variedad de plantas que allí
se adaptaron y prosperaron. Tomar muestras de los lagos volcánicos es por regla
una tarea difícil, sólo precedida en dos ocasiones en la Isla de Pascua, la
primera por Thor Heyerdahl en los 50 (habiendo trabajado en el Rano Raraku), y la segunda por John Flenley en los 80 (trabajando en los
tres volcanes de la isla, el Rano Raraku, el Rano Kau y el Rano Aroi). Estos
primeros trabajos demostraron la existencia en el pasado de una gran cantidad
de palmeras similares a la palmera más grande del mundo, la Juabaea chilensis. El equipo de la Dra.
Gossen realizó por tercera vez este tipo de trabajo, extrayendo muestras del
lago interno del volcán Rano Kau, situado en el vértice suroeste de la isla, de
difícil acceso y aún más bajando con todo el equipo y herramientas por las
escarpadas laderas volcánicas hasta el lago de cerca de 1 kilómetro de ancho (el
más grande de la isla) atravesado por una maraña de plantas flotantes, de 2 a 4
metros de profundidad.
Laderas internas del volcán Rano Raraku |
Campaña
2005
Las muestras recogidas por el equipo en el año 2005,
extraídas de cerca del centro del lago, contenían 2 metros de una mezcla de totora
flotante, 10,5 metros de agua y 9 de sedimento. Se analizaron 90 muestras de polen
fósil (para identificar las especies de plantas), semillas de totora o Scirpus californicus (análisis
radiocarbónicos para establecer las cronologías), y celulosa de plantas
acuáticas (análisis de los isótopos de oxígeno, para ver los cambios en los niveles
de agua del lago y el clima), dando como resultado interesantes informaciones
sobre los últimos 15.000 años de historia ecológica del lago y por tanto de la
isla. En esta ocasión, los datos que hubieran servido para investigar el
impacto del ser humano en la deforestación de la isla, que era sólo un extra en
el proyecto, se encontraban en el estrato de totora, pues había sido datado y contenía
los años más recientes. Pero dos años más tarde, en 2007 cuando fueron a
trabajar con las muestras de este nivel para analizarlas, la mayoría estaba
perdido o consolidado, muy diferente al momento de la extracción de la muestra.
La cronología ya estaba establecida, pero análisis sobre polen e isótopos
fueron imposibles, y la cuestión del impacto del ser humano sobre el medio
ambiente de Isla de Pascua, continuaba sin respuesta.
Colaboradores tomando muestras |
Campaña
2008
El equipo decidió volver en 2008 para tomar otras
cinco muestras del estrato de totora flotante, y paliar la falta de información
sobre este período, con éxito. Se tomaron muestras de especímenes de plantas
acuáticas (totora y Polygonum acuminatum),
palinomorfos (musgo, hongos y otras pequeñas plantas, almidón, bacteria y
resina), polen fósil y macrofósiles, que fueron sometidas a los mismos análisis
de la campaña anterior. Previamente al muestreo todo el material fue escaneado
por susceptibilidad magnética de alta resolución y espectrofotometría de color).
Los nuevos registros del estrato de totora fueron muestreados para análisis de
polen e isótopos, y completaron comparativamente la información arrojada por
las muestras de la campaña 2005. Todavía están pendientes los análisis
radiocarbónicos para extraer cronologías seguras de estas muestras, las cuales
contienen los últimos 1.000 años de información de la isla. Por lo tanto, de
momento, todas las cronologías manejadas en este trabajo están basadas en las
muestras de la campaña del 2005.
Localización de muestras KA03, KA04, KA05, KA06 |
Resultados
Los resultados presentaron interesantes datos que
ayudan sin duda a responder las preguntas sobre el impacto de los cambios
climáticos y de los antiguos rapanui sobre su frágil medioambiente como posibles
razones del colapso. Pero mucho más. Los análisis de los materiales
testigos de 15.000 años de historia ecológica de la Isla de Pascua, arrojaron
la existencia de 33 plantas diferentes (Coprosma,
Xilosma, Caesalpinia, Portulaca, Inocarpus, Chenopodium, Cordyline, Canavali,
Ephedra, Quercus), 4 especies no identificadas de palmeras (Pascalococos disperta y otras), actividad
volcánica de hace 2.500 años, y signos de actividad humana que indican una
llegada a la Isla de Pascua muy anterior al paradigma manejado hasta ahora. Además las evidencias apoyan que en Rapa Nui, no fue
el hombre el único responsable de la devastación del entorno, incluida la
extinción de las palmeras, sino más bien los abruptos cambios climáticos
(relacionados con la extinción del polen en las muestras analizadas en el
proyecto RKE08) en conjunto con otros factores como posibles. Sin embargo, a pesar de que el último polen de palma
fue visto en el sedimento de lago en 545BP, esto no significa que es cuando los
árboles desaparecieron, es asumido así, pero no necesariamente cierto. Los
árboles podrían haber vivido su vida sin producir polen durante otros 100-200 años, y el cambio
climático que ocurrió en esta fecha no fue lo bastante drástico como para
causar la desaparición de las palmeras, pero indirectamente puede haber estado
relacionado con lo que les pasó. Esto quiere decir que, según la Dra. Gossen,
el cambio climático no causó la desaparición de las palmas.
Candace Gossen y Alejandro Haoa tomando muestras en volcán Rano Kau |
Muestra de sedimento |
La extinción masiva de las palmeras
Los
trabajos de Heyerdahl (1958) y Flenley (1980’s) para estudiar el polen de las
palmeras extintas, aportaban informaciones aproximadas sobre la existencia de
las mismas en el pasado de la isla. Las dataciones por
carbono 14 de Flenley permitieron convincentemente establecer fechas para los
períodos en los que comenzó la quema de la madera, a partir de la presencia del
hombre, asociados con la desaparición del polen de las palmeras de la
superficie isleña. Evidencias muestran carbón en el 800 d.C. asociado a la
desaparición del polen en el 1.550d.C. Más tarde,
Meith y Bork (2003) realizaron unas
innovadoras excavaciones de las antiguas raíces de estos árboles. Estos
trabajos, pudieron determinar que más de 16 millones de palmeras existieron en
la pequeña Isla de Pascua. El cálculo de la relación entre ambos datos,
claramente argumenta que la isla fue clareada de palmeras progresivamente a
partir del 800 d.C. La correspondencia entre la aparición de carbón que
demuestra quema masiva de palmeras y la desaparición del polen de las mismas,
es recurrente en Rapa Nui y en otras áreas del Pacífico. Sin embargo, los trabajos
del proyecto de la Dra. Gossen demuestran que hubo quemas masivas de madera en
345 a.C., 545 a.C., 1.173 a.C. y 3.500 a.C., eventos que no provocaron la
extinción del polen de algunas especies de palmera, que según los análisis del
proyecto ocurre en 545 a.C., no sólo para una especie, sino para las cuatro
identificadas, a pesar de que algunas desaparecieron con anterioridad. Esta
fecha coincide además con presencia humana y con un enfriamiento climático.
Plantas de totora en el lago del interior del Rano Kau, de hasta 4 metros de alto |
Muestra de sedimento |
Presencia humana
A pesar de
que el proyecto RKE08 no tenía como objetivo responder a las preguntas que aún
quedan sobre la presencia humana en Rapa Nui, las evidencias de la misma en las
muestras del estrato de totora usadas para analizar los cambios climáticos y la
ecología de las plantas, fueron incluidas en el proyecto, como un extra, y
merecen más profundos estudios en el futuro. Hay pruebas de polen de hierba
larga, abundante carbón vegetal y ceniza, y una introducción de plantas antes
desconocidas a la isla que conducen a la ocupación humana en 1.173 a. C.
Períodos anteriores también contienen lo que parecen ser pruebas de presencia
humana en la isla. Estas cronologías estarían
desafiando las fechas aceptadas hasta la actualidad para la llegada del hombre
a la isla (400 d.C. según las
excavaciones arqueológicas de Heyerdahl, y muy posteriores según
investigaciones más recientes). También podría indicar la posibilidad de más de
una migración o visitas previas al asentamiento. O quizá un asentamiento muy
anterior a los que las teorías aceptadas postulan.
Candace Gossen, Michael Osborne y Ki Istre |
Totora
Esta planta existió
en la isla durante los 15.000 años que abarcan las muestras del proyecto, y se
encontraron variaciones entre las del Rano Kau y las del Rano Raraku, siendo
sin embargo el ADN de las del Rano Kau, similar o parecido al de la costa de
Perú. A partir de hace 2.000 años aproximadamente, la morfología de las
semillas cambia, lo que podría indicar cambios climáticos, adaptación de las
especies, o la introducción de una nueva especie a la isla con intencionalidad
de cultivo. Por otra parte, estratos de sedimento perdido (5 metros, core KA06)
que forman como una especie de trincheras, podrían indicar también que algo pasó
cerca del límite del lago. De las 4 muestras del 2005, sólo la KA03 fue usada
para análisis, KA04, KA05 y KA06 fueron usadas también para estudios comparativos.
Conclusiones
De acuerdo con los resultados de los análisis
desarrollados por la Dra. Gossen en el marco del proyecto RKE08, abruptos
cambios climáticos ocurrieron durante
los 15.000 años que abarcan las muestras recogidas. Y los ciclos de sequía
siguen patrones de 700 años. En el resumen, la Dra. Gossen ha analizado
sistemáticamente una amplia vista de la ecología de la isla y los cambios que
tarde o temprano condujeron a la desaparición de las gigantescas palmeras. La
enormidad de esta pérdida dejó la isla como una tierra estéril desprovista de
su esencia. Cuando se entiende que las palmeras son monocotos, que respiran con
un sistema vascular similar al humano, entonces la pérdida de 16 millones de
estas palmas gigantescas, se hace aún más importante en la comprensión del
problema. Para la gente antigua de la isla, en 545 a.C. ocurrió un evento de
enfriamiento, en el mismo período de tiempo en que el último polen de palma es
encontrado en el sedimento de lago, pero las causas directas no se han
encontrado. La Dra. Gossen ve los árboles como una esencia valiosa que los
antiguos honraron, y valoraron como un recurso que contiene gran cantidad de
agua dulce con casi 100 galones por árbol. Es más plausible aceptar que con la
introducción de taro como una cosecha principal de alimentos, y un
acontecimiento que se enfría que dejó el taro para legar, que los árboles
entonces se hicieron más valiosos como recurso de alimentos que como rodillos
para el transporte de moai.
Consideraciones de la autora del artículo
El apasionante tema sobre el colapso medioambiental
en la isla ve abiertas nuevas perspectivas de estudio a partir de los trabajos
presentados recientemente por la Dra. Gossen, en su tesis doctoral publicada en
2011 en la Universidad de Portland. Aún queda mucho trabajo por realizar, sobre
todo en lo que se refiere a la presencia humana en Rapa Nui, que según los
resultados del proyecto sería sorprendentemente muy anterior a las fechas
aceptadas hasta ahora. La totora ha aportado valiosa información para el tema. El
cambio en la morfología de las semillas y la desaparición de 5 metros de
sedimento en el lago, permite sugerir que hubo manipulación deliberada del
sedimento del lago por humanos, cerca de los bordes del lago, y es comparable
con las presentes en la costa peruana conocidas como técnica de cultivo de esta
planta, lo que resulta muy inquietante, y deberá ser sometido a un profundo
estudio en el futuro. ¿Fueron los antiguos rapanui responsables de la
devastación de su frágil medioambiente? ¿Y de la extinción de las palmeras?
¿Fueron éstas cortadas indiscriminadamente por los antiguos rapanui con el
objetivo de preparar el terreno para la agricultura y para transportar los moai? Los resultados de los trabajos
desarrollados en este proyecto me llevan a pensar que la respuesta es no. No es
loable pensar que los antiguos rapanui se autoinfligieron semejante deterioro
ambiental de forma indiscriminada. Sin embargo, si está claro que la
sobreexplotación de los recursos en una medioambiente extremadamente frágil
como el de Rapa Nui, es el factor más probable del colapso medioambiental.
Bibliografía
CANDACE LYNN GOSSEN, 2011. Deforestation, Drought and
Humans: New Discoveries of the Late Quaternary Paleoenvironment of Rapa Nui
(Easter Island). Portland State University, 2011, 486 páginas, ATT 3469133.
ProQuest
JARED DIAMOND, 2006. Colapso.
Por qué unas sociedades perduran y otras desaparecen. Debate, Barcelona
Interesantísimo trabajo, que aporta nuevos datos al pasado isleño. Sobre todo, la posible ocupación antes de nuestra era (aunque se especifica que debe profundizarse en los análisis), que abriría perspectivas interesantísimas relacionadas con nuestro pasado más remoto.
ResponderEliminarGracias Manu, esperamos más resultados, pues como dices, es un trabajo interesantísimo.
EliminarSalud Alejandra, he leído con mucho interés el artículo que presentas y seguido con atención el laborioso esfuerzo por detectar las posibles causas de ese "colapso" -crisis social y medio-ambiental- en la historia de la isla. Encomiable trabajo, sin duda, que sorprende y llega a tocar (salvando las circunstancias y diferencias, claro), elementos de preocupación de singular actualidad (los cambios climáticos, recalentamiento global, etc. etc.) Sin pretensión alguna de establecer ninguna comparación, el trabajo realizado en Rapa Nuit en busca de develar tantas interrogantes, me lleva también a re-pensar los tópicos de cambios climáticos, por ejemplo, que en la actualidad son materia de preocupación a nivel de todo el planeta. Se me ocurre (aunque a nivel "casero", digamos), que si se desvelasen algunas de las claves que originaron esa devastación crítica en lo social y medio-ambiental en la isla, de alguna manera también "podría" ser de significación para acercarnos a una mayor comprensión y toma de conciencia, de lo crítico que llega a ser esta alteración del medio-ambiente, hoy a nivel global. Es de mucho interés este artículo que vuelvo a agradecer, me lo hayas enviado, así -también- poder compartirlo con algunos amigos afines a estas inquietudes. Saludos. Teresita
ResponderEliminarHola Teresita, tanto tiempo, espero que esté todo bien por Montevideo. Pues sí, estos temas poseen el interés añadido de que nos sirven como aprendizaje para entender qué es lo que está pasando en nuestros días. Un saludo.
EliminarMuy interesante reportaje sobre el posible colapso ambiental que sufrió Rapa Nui. Sin embargo ya sabes mi opinión: hacen falta estudios de la situación actual. Asociaciones y entidades científicas comprometidas con la isla y su gente deberían denunciar la inexistencia de depuradoras para las aguas residuales, los vertederos incontrolados, el turismo excesivo, la repoblación con especies foráneas y el transporte contaminante... Alternativa ecológica: Ecotaxa turística, transporte eléctrico o solar, reciclaje de los residuos, energía solar térmica y fotovoltaica, agricultura biológica, prohibir los residuos plásticos, regenerar la democracia local y fomentar la lengua, la literatura y el arte rapanui. El problema son las trabas que se encuentran... Un abrazo, Santiago.
ResponderEliminarGracias Santiago, sí, los esfuerzos se están realizando en este sentido desde varios grupos de isleños, pero a veces se encuentran con limitaciones dentro de sus propios administradores (no sólo chilenos). Un abrazo para ti también.
EliminarGracias Josef...
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